Hoy en HablemosDeCoches vamos a hablar de un elemento con amor, concretamente del amortiguador.
¿Para qué sirven los amortiguadores?
Para amortiguar. Muy bien, ya eres un experto ingeniero, te mereces todo lo bueno que te pase.
En fin. Los amortiguadores tienen dos misiones principalmente: hacer la marcha del vehículo más cómoda, y mantenerlo pegado al suelo. Vamos por partes.
El firme del suelo no es perfectamente plano, además el motor vibra y todo esto repercute en que el coche se menea para arriba y para abajo, torsiona, y en general se vuelve incómodo y genera mareos, a menos que cuentes con unas buenas See-Troen.
El hecho de que el coche no esté directamente apoyado en el suelo, sino que haya varios elementos amortiguadores (el amortiguador propiamente dicho y las ruedas en sí), hace que no notes cada puñetera piedra del camino y que los baches te molesten mucho menos en los riñones.

Por otra parte, si no hubiera algo que amortiguase, después de cada pequeña irregularidad del terreno las ruedas pegarían un pequeño saltito y eso podría hacer que te fueses a tomar por culo en la primera curva y no llegues a Valencia para comerte la paella. Y no queremos eso.
Veamos cómo funciona la amortiguación de un coche
En primer lugar, debe haber una unión elástica entre las ruedas y el resto del coche. Esto se hace mediante muelles. Pero los muelles no amortiguan. Un momento, ¡no hemos definido lo que significa amortiguar!
Amortiguar consiste en disipar la energía cinética. Y esto es algo que los muelles casi no hacen. Los muelles dejarían el coche oscilando arriba y abajo durante muchísimo tiempo y no servirían de nada, por lo que, paralelamente (por dentro del muelle) se sitúa un amortiguador, que lo que hace es convertir en calor la energía cinética, de modo que en una o dos oscilaciones se haya “disipado” y el coche ni se menee.

Dentro del amortiguador hay dos cámaras llenas de aceite separadas por un agujerito pequeño, y para que el amortiguador se estire y se encoja el aceite debe pasar a través de ese agujero de una cámara a otra. Como el aceite “se resiste” a hacerlo, la energía cinética lo fuerza a pasar por el agujerito, convirtiéndose en calor y dejando tranquilo a tu coche.
Eso hace que con el tiempo el agujerito se ensanche y el amortiguador cada vez funcione peor. Eso es lo que se considera un amortiguador desgastado.
Otra posible avería del amortiguador es que, debido a que le demos una hostia más fuerte de lo normal se le rompa algún retén y pierda el aceite o parte de él, con lo que también amortiguará peor.
Ahora ya sabes por qué hay que cuidar los amortiguadores, pero si tienes alguna duda puedes dejárnosla en los comentarios, o hacérnosla llegar a través de Facebook, Twitter o Instagram. Y si quieres que te avisemos cuando publiquemos más artículos suscríbete a nuestra newsletter.
4 comentarios en «Amortiguadores, lo que te mantiene pegado al suelo»
Tener un coche o una furgoneta a punto es imprescindible para tu propia seguridad y para la de los demás..
Los amortiguadores parecen unas piezas más en el coche, pero que función tan importante hacen. Como dice el texto, si están mal pueden llegar a marear a los pasajeros, en especial a los más pequeños. Por ello es bueno revisarlos de vez en cuando. Una magnífica explicación.
Una muy buena explicación de la función de los amortiguadores. En resumen, que como no tengas buenos amortiguadores te espera un viaje en la montaña rusa… Eso sí, a veces las vibraciones son inevitables dependiendo del coche que sea 😅
Mejor resumido imposible, jejeje