Hoy en HablemosDeCoches vamos a contar la historia de uno de nuestros coches favoritos en el mundo, por lo original del diseño, lo que ha durado, y porque el concepto en sí no podía molar más. Hoy hablamos del Citroën 2 cv.
El coche de los huevos
Estábamos a principios del siglo XX, cuando Pier-Jules Boulanger comenzó el diseño de un prototipo que él llamó TPV, o furgoneta mínima. La idea era que fuera baratísimo, una especie de coche del pueblo francés, como el Escarabajo de Volkswagen.
Así que partieron de una premisa muy lógica para cualquier persona:
“El coche del pueblo francés debe ser capaz de cruzar un sembrado recién arado, perpendicularmente a los surcos, con cuatro personas y una cesta de huevos, sin que los huevos se rompan”.
ES SIMPLEMENTE BRUTAL. ¡Imagina las caras de los ingenieros cuando le oyeron!
Y lo mejor es que lo consiguieron, porque montaron un sistema de suspensión en el que las ruedas de alante estaban conectadas a las de atrás, y el coche ganaba muchas estabilidad.

Debió cogerles con el pie cambiado, porque al final tardaron 14 años en diseñarlo.
Empezaron en 1934 y hasta 1948 no pudieron presentarlo. En realidad lo tenían listo en 1939, pero como estalló la Segunda Guerra Mundial entendieron que lo mejor sería posponerlo, así que siguieron desarrollando el coche en secreto.
La mayoría de los prototipos se destruyeron, por el miedo a que cayeran en manos de los alemanes y les robaran la tecnología (sí, la tecnología del 2 cv). Aunque se consiguieron recuperar 5 de esos prototipos.
El hecho de que se retrasase es genial, porque propició que el coche siguiese desarrollándose, y entre otras cosas ganase más potencia, y al final el 2 caballos tenía 9 CV. Supongo que en parte lo hicieron por tocar los huevos.
Otra cosa que le cambiaron en ese periodo fue la caja de cambios, con lo que ganó una lujosa caja de 4 marchas, en vez de las 3 que iba a tener inicialmente.
Cuando se presentó, impactó a la prensa tanto que según cuentan las leyendas negras de la automoción, un periodista preguntó a los responsables de la marca “¿y dónde está el abrelatas?”.
Las mejoras del 2 caballos
El 2 caballos se vendió desde 1948 hasta 1990, y en ese periodo dio tiempo a hacer 5.100.000 unidades, que es una brutalidad lo mires por donde lo mires.
En 1959 comenzó a producirse en Vigo, tanto el 2 caballos normal como la versión furgoneta, y de ahí en adelante se fueron metiendo mejoras.
Se modificaron los faros, la rejilla delantera, y se puso una tercera ventanilla en el pilar C que le daba un aire más moderno y más luz.

También se le añadieron lujos, como cinturones de seguridad. Pero sólo en los asientos delanteros, que tampoco hay que aburguesarse.
En 1964 se amplió a 16 caballos, toda una locura, y la cosa no paró ahí, así que posteriormente se sacaron veriones de 24 y 32 caballos… ¡Y después 35! A lo puto loco.
En realidad, teniendo en cuenta que el coche pesaba sólo 600 kilos no iba tan justo de potencia.
De hecho, fíjate lo poco que pesaría que al fabricarlo, el chasis se arrastraba por el suelo a mano.
Además el coche se utilizó para probar algunas locuras de Citroën, como una suspensión hidroneumática que en aquel momento era imposible… Y se siguió fabricando hasta la actualidad.
O una versión llamada 2 caballos Sahara 4×4 que tenía dos motores de 12 caballos, uno para cada eje, y que estaban conectados entre sí por un diferencial electrónico. Ojo, ¡que lo hicieron en 1958!
Y el no va más fue cuando hicieron una versión redondeada, con carrocería de fibra de vidrio para venderla en Gran Bretaña. Claro, que era más caro y lento, y no se vendió apenas, siendo un fracaso absoluto, pero para nosotros es historia de la automoción, el Citroën Bijou.

Si os interesa, aquí tenéis la ficha técnica del coche, en un buen artículo de Motormanía.
Y si quieres que todo el mundo sepa lo friki que eres siempre puedes hacerte con esta camiseta del 2 cv y de paso colaboras con HablemosDeCoches.
¿Sabías que antes los coches se diseñaban para cruzar sembrados? Cuéntanoslo en comentarios, o a través de Facebook, Twitter, o Google+.
2 comentarios en «Citroën 2 cv, el coche de los huevos»
¡¡ Qué chulo con la rueda en la parte delantera!! Saludos
¡Nos alegramos de que te guste! ¿Has tenido uno?